Hoy os
voy a hablar de un claro ejemplo de eutanasia Ramón Sampedro que inspiro la
famosa película Mar adentro protagonizada por Javier Bardem y Belén Rueda.
Este gallego nació el 5 de enero en Puerto
del Son. A los 18 años se metió de lleno en la marina como mercante con el
objetivo principal de conocer mundo pero a los veinticinco años tras un
accidente su vida se truco, se tiro de cabeza al agua desde una roca un día de
resaca marítima, la cual le dejo tetrapléjico y postrado en una cama para el
resto de su vida.
Este señor fue el primer español que pidió el
suicidio asistido argumentando el derecho de cada individuo a disponer de su
propia vida, estando incapacitado para cometer suicidio. Su petición fue
denegada porque el Código Penal vigente no lo permitía, al igual que ocurre
actualmente como indica que "El que causare o cooperare activamente con
actos necesarios y directos a la muerte de otro, por petición expresa, seria e
inequívoca de éste, en el caso de que la víctima sufriera una enfermedad grave
que conduciría necesariamente a su muerte, o que produjera graves padecimientos
permanentes y difíciles de soportar" este será castigado con la pena inferior en
uno o dos grados a la de prisión de 2 a 5 años (para la mera cooperación con
actos necesarios) o a la de prisión de 6 a 10 años (si la cooperación llegara
hasta el punto de ejecutar la muerte).
Pero toda su desgracia no le impido a Ramón escribir
dos libros, Cartas desde el Infierno (1996) y el poemario Cuando yo caiga
(1998). Falleció en Boiro el 12 de enero de 1998 por envenenamiento de cianuro potásico,
ayudado por una amiga Ramona Maneiro.
Ésta fue detenida días después pero no fue
juzgada por falta de pruebas. Siete años después, una vez que el delito hubo
prescrito, Ramona admitió en televisión haber facilitado a Ramón el acceso al
veneno que le causó la muerte y haber grabado el vídeo donde éste pronunció sus
últimas palabras.