miércoles, 14 de noviembre de 2012

Testamento vital


Existe el testamento vital que es un documento de carácter privado en el cual las personas  que quieren dejan por escrito su voluntad de no ser mantenidos en esta vegetativo, resumiendo, no desean alargar sus sufrimientos en situaciones irreversibles.

El testamento vital es un documento de carácter privado mediante el cual las personas que lo desean hacen constar por escrito su voluntad de no ser mantenidos en estado vegetativo ni, en general, de alargar sus sufrimientos en situaciones irreversibles.

En España, existe un testamento vital que fue propuesto por la Asociación Derecho a Morir Dignamente que permite a la persona adulta, que lo firmara bajo la presencia de testigos y deberá expresar  “su voluntad de no ser sometida, en el caso de una enfermedad irreversible que cause graves sufrimientos, a tratamientos que prolonguen su vida”. El firmante además designa, a la persona que nombra como representante suyo, en el caso de que quede inconsciente. El testamento, en su forma actual, no reclama ni la ayuda al suicidio ni la eutanasia activa. En torno al ámbito legal, no existe ninguna regulación al respecto.

Se cuestiona la validez del testamento vital debido a que sus actuaciones son minoritarias, y también en el tiempo que trascurre desde la firma hasta dicho momento. En cualquier caso, debe reconocerse el valor indicativo del testamento vital en cuanto a las preferencias del paciente ya que es una declaración expresa de su voluntad.

Ejemplo de testamento vital

 “El abajo firmante  ..........................  ejerciendo mis derechos civiles, declaro con plena consciencia y libertad que si algún día me viese incapacitado para expresar mi voluntad y los tratamientos posibles no fuesen capaces de devolverme a una vida consciente y autónoma, pido encarecidamente:
1º- Que se abstengan de cualquier encarnizamiento terapéutico para prolongar abusivamente mi vida.
2º- Que se utilicen todos los medios para calmar mis dolores, incluso si los únicos que queden por utilizar y que sean eficaces pueden acortar mis días.
3º- Que en última instancia se me conceda la eutanasia, es decir, una muerte dulce, consciente de que con eso planteo un problema, sobre todo a los médicos y al personal sanitario, pero convencido de que tendrán en cuenta ante todo el respeto a la persona humana. Confío en que los médicos, el personal sanitario que me cuide o cualquier otra persona respete estas mis últimas voluntades y les doy las gracias por ello.”



No hay comentarios:

Publicar un comentario